La Escuela de Psicología UCAB pide articular y diseñar políticas contra el suicidio

10 de abril de 2024

El equipo de expertos de la Escuela de Psicología de la Universidad Católica Andrés Bello se propone averiguar «qué hay detrás de las estadísticas» crecientes de suicidio en el país. Y tras una primera aproximación que hizo con las comunidades de Santo Domingo y Pueblo Llano, en el páramo de Mérida, impulsará una red de promoción y atención de la salud mental, que incluirá la línea de atención telefónica PsicoAyuda UCAB.

Así lo afirmó Danny Socorro, S.J., director de la Escuelaquien hizo una invitación pública a las instancias gubernamentales, privadas y sociales, para articularse y diseñar «con urgencia» políticas públicas que brinden oportunidades a quienes «buscan ayuda y no tienen dónde ir, y si saben dónde ir no tienen el dinero suficiente».

El docente y sacerdote jesuita encabezó la presentación de los hallazgos y conclusiones preliminares del Campamento Psicosocial 2024, iniciativa que se desarrolló entre el 18 y el 25 de febrero pasado y en la que docentes y estudiantes de Psicología UCAB condujeron actividades de intervención, educación y orientación terapéutica dirigidas a la población local.

El campamento fue el punto de partida del Programa de Prevención del Suicidio que la Escuela anunció a principios de 2023, una propuesta de investigación y acompañamiento para abordar y disminuir las cifras de muertes autoinfligidas en el país.

Según el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), en 2023 la tasa de suicidios en Venezuela subió a 8,2 por cada 100 mil habitantes, 6,5% más que en 2022.

Socorro dijo que uno de los principales objetivos próximos es «consolidar un trabajo que ya viene haciendo la Federación de Psicólogos de Venezuela con esta red de atención. Queremos sumar a psicólogos y psiquiatras para que en su agenda de la semana  le regalen a Venezuela dos o tres horas para poder atender estas emergencias emocionales (…), a la línea de ayuda PsicoAyuda UCAB le vamos a abrir caminos«, esto como parte de una estrategia más amplia de promoción de la salud mental.

Sobre esta línea de ayuda se ofrecerán más detalles en abril. En principio, funcionaría una vez a la semana y se ampliará a medida que se consiga financiamiento.

Entre otros objetivos inmediatos de la Escuela, relacionados con la promoción de la salud mental, el director citó la presentación, «a más tardar en junio», del estudio Psicodata Venezuela 2024; también habló de programas y talleres de formación con instituciones educativas y empresas, y de la realización de campamentos psicosociales en otras zonas del país —el próximo en el estado Lara—, en colaboración con el OVV.

MÁS DE 1.000 PERSONAS ATENDIDAS EN MÉRIDA

En el auditorio Padre Gustavo Sucre, S.J.  del campus de Montalbán, parte del equipo que se trasladó a Mérida explicó los hallazgos levantados en las interacciones directas por 10 profesionales y 8 estudiantes avanzados de la carrera de Psicología en la UCAB, quienes  desarrollaron las actividades de intervención durante ocho días, en coordinación con la Fundación Cultivar.

Junto a Socorro, en la presentación de las conclusiones estuvieron Silvana Campagnaro, Celibeth Guarín, María Alejandra Corredor, Marina Del Gatto, María Graciela Fernández y José Eduardo Rondón, seis de los 10 docentes; también Mariana Paquin y Ángel Moreno, dos de los ocho alumnos que participaron en el campamento.

Los expertos de la UCAB explicaron que el campamento se realizó en el estado andino porque, según cifras del Observatorio Venezolano de Violencia, esa entidad tiene la tasa más alta de suicidios del país: 15,5 ciudadanos por cada 100.000 habitantes, casi el doble de la media nacional.

Según explicó la profesora Celibeth Guarín, el equipo se reunió con funcionarios públicos, líderes locales, comunidades, trabajadores de la salud, sociedad civil y medios de comunicación de Santo Domingo y Pueblo Llano.

En total fueron 1.087 los beneficiarios directos de la intervención, de los cuales 118 fueron atendidos en consulta clínica y 306 participaron en entrevistas psicosociales. Otros 44 fueron evaluados en tests psicológicos.

ECONOMÍA, EL PRINCIPAL ESTRESOR. DOS DE CADA 10 CON IDEAS SUICIDAS

El investigador José Eduardo Rondón se refirió a los datos cuantitativos obtenidos durante las consultas y evaluaciones psicológicas. Comentó que  para el 78,48% de las 309 personas atendidas (de las cuales 62,14% eran mujeres y 37,86% hombres), «su ingreso económico es insuficiente» y para el 57% «su estresor es económico».

Asimismo, el 78,15% dijo no haber acudido nunca a consulta psicológica, no obstante que en la muestra hay un 20% de personas con pensamiento suicida y 12% presenta conducta suicida.

Identificó en los menores de 30 años una conducta impulsiva mayor que se asocia a mayor riesgo de suicidio.

Rondón dejó claro, ante una pregunta, que no se observó en la población estudiada mayor incidencia de conducta suicida en las mujeres que en los hombres, «intención sí, conducta no».

La profesora  Silvana Campagnaro, exdirectora de la Escuela de Psicología, relató que los estudiantes ucabistas dijeron que tras la experiencia «habían entendido la palabra burbuja cuando se habla de vivir en Caracas».

También destacó en enorme «dolor psicológico» de los pobladores locales que manifestaron «la necesidad tremenda de ser escuchados en cuanto a sus urgencias básicas: luz, trabajo, salud, gasolina, acceso a la justicia», a lo que se suman problemas como «la soledad del adulto mayor, consumo de alcohol, violencia intrafamiliar, falta de oportunidades de recreación y sin acceso al arte y la cultura».

Campagnaro afirmó que lo que está sucediendo con la tasa de suicidios en Venezuela interpela a la sociedad y destacó que la actividad cumplida por el equipo de Psicología UCAB fue costosa, de modo que se requiere encontrar fórmulas de financiamiento para las próximas actividades.

LOS ADOLESCENTES SUFREN ACOSO Y SOLEDAD

La profesora María Alejandra Corredor explicó detalles de las evaluaciones individuales y los motivos principales para acudir a la consulta.

Uno de los hallazgos más significativos evidenciados es que «el comportamiento suicida, en esta población, no parece ser un evento impulsivo, aparece después de un proceso reflexivo»; «el sufrimiento está mayormente asociado con pobres relaciones interpersonales» y «la soledad es un elemento crucial y diferenciador entre los que han intentado suicidarse y los que no».

Recalcó Corredor que quienes son proclives a ideas suicidas «no tienen capacidad de buscar ayuda».

Por su parte, la docente Marina Del Gatto habló de su experiencia con los niños, niñas y adolescentes, el grupo más numeroso de participantes, con quienes trabajó con la comunicación pasiva y asertiva.

“Para ellos, esa semana fue una fiesta”, dijo para ilustrar la gran necesidad que los más jóvenes expresaron de ser atendidos en sus emociones.

Mencionó Del Gatto que las «situaciones más terribles» fueron identificadas por los adolescentes, que relataron actos de violencia intrafamiliar como “acoso, desconfianza y soledad” y si expresan esos sentimientos «está mal visto».

La profesora María Graciela Fernández, investigadora del Centro de Investigación y Evaluación Institucional (CIEI) y docente de la Escuela de Educación UCAB, trabajó con los maestros de las localidades visitadas. Dijo que muchos son percibidos como líderes sociales de la comunidad, pero «sienten un gran peso sobre sus hombros», lo que implica una importante presión emocional, además de que se encuentran desmotivados por los bajos sueldos y la falta de atención al educador.

Indicó que una de las principales solicitudes recibida fue la creación de una escuela de padres, así como se identificó «una brecha importante entre los equipos directivos de las escuelas y los docentes».

También los padres y representantes manifestaron gran interés en saber cómo manejar el tema de las redes sociales con los niños, niñas y adolescentes.

Otro elemento detectado es el abordaje de «niños con condición» en las escuelas para aproximarlos al concepto de «niños con necesidades educativas especiales», precisó Fernández.

CONDICIONANTES MÚLTIPLES: MUCHO POR INVESTIGAR

El director de la Escuela, Danny Socorro,  fue insistente en dejar claro que la data levantada en Mérida es apenas «la punta del iceberg» y que «el suicidio tiene causas multideterminadas» que seguirán estudiando.

Entre las conclusiones preliminares tras el trabajo realizado, destacó las identificadas como «determinantes contextuales», que inciden en los estados emocionales de los merideños estudiados y pueden aumentar el riesgo de que las personas acaben con su vida.

La inestabilidad económica, las escasas oportunidades de recreación,  los problemas de servicios públicos, las intensas jornadas de trabajo, la discriminación a la diversidad sexual, la migración y la discriminación de niños y adultos hacia las personas neurodiversas se cuentan entre esos factores.

A esto se suman  determinantes familiares (como violencia intrafamiliar, antecedentes de suicidio en el grupo cercano, entre otros) y  personales (desesperanza, sentimientos de soledad, enfermedades crónicas, aislamiento e incertidumbre por el futuro).

El padre Danny Socorro llamó al Estado, la sociedad civil y los medios de comunicación a movilizarse  y visibilizar los problemas de salud mental en Venezuela, sin amarillismo ni prejuicios, para contribuir con el trabajo de prevención.

Puso a disposición la cuenta en redes sociales de la Escuela, @psicologia_UCAB, así como su página: https://psicologia.ucab.edu.ve 

Los interesados en conocer la presentación completa de hallazgos del Campamento Psicosocial UCAB 2024, realizado por la Escuela de Psicología de la UCAB, pueden hacer clic en este enlace: https://goo.su/DJUcxvT

♦Texto: Elvia Gómez/Fotos: Manuel Sardá